Stella Accorinti, MIRTA - Capítulo 11
CARTAS DE MIRTA, IIBoston, 22 de agosto de 2002
Casandra, hija de mi alma:
¿Cómo estás? ¿Cómo está Clarice? Esta carta es de la semana del 18 al 25 de agosto (sí, escribo la carta durante toda la semana, siguiendo tu estilo, Casandra
Hola mi Clarice, cómo estás? Acá te mando una nota que salió en el diario, sobre los cometas de Boedo, mi princesita. ¿El año que viene vas a retomar murga? ¿Vas a estar con los Cometas o vas a ir a otra? Fijáte en la nota hablan de Pacha. Clarice, respecto de ballet, Fijáte si cerca de tu nueva casita hay alguna profe que sea tan buena profe como Marta.
Casandra, hija, no encuentro un documento que necesito, mi título, son unas tres hojas, donde se especifica la cantidad de horas, notas, etc. Me hace mucha falta, es el analítico. Quizás esté en tu casa, ya avisé a Melina, y a Silvana también. Con las cajas de las cosas desparramadas en tantas casas no recuerdo dónde está, y ni siquiera sé si está en casa de alguna de ustedes o si lo perdí.
Te mando acá un cuentito que escribí el 13 de agosto, a ver qué te parece. Hija, si podés mandá cuentos tuyos a concursos, hay uno donde podés mandar dos, con seudónimo y adentro tenés que poner seis copias, un diskete con el texto y un sobre (adentro del sobre grande) que tenga nombre, dirección, teléfono y el nombre del cuento. Después me fijo en la dirección. Le mandé tu relato “Algo” a Ioli, le encantó. Te cuento que todos los días escucho radios de la Argentina, por Internet
Me causa gracia, porque ahora que descubrí esto de escribirte así, hago como vos, a medida que me acuerdo cosas, escribo, es como hablar con vos y con Clarice. En cambio si me siento a escribir en un momento determinado, escribo poco, y además, se me cansa la mano. Te mando fotos de cuando estuvo Melina, en algunas parece una loca, y en otras, peor Las de Salem me gustan mucho.
Casandri, voy a pedir las partidas de nacimiento de mis abuelos, y de matrimonio, una vez más, a Tropea. Ahora tengo todos los datos. Puse la dirección de tu casa para que las envíen, por si Melina tiene que hacer algún trámite de los muchos que aún faltan (traducciones, búsqueda de la partida de defunción de mi papá, búsqueda del certificado de que mi abuelo no se nacionalizó argentino, etc.). Avisáme cuando llegan, si es que las mandan. La carta mía llegará a Italia a fin de mes, con un poco de suerte a fines de septiembre, principios de octubre quizá tengas los documentos en tu casa.
(Recién llego del correo, ya mandé el cuento al concurso. No tenían estampillas internacionales para pedir lo de mis abuelos, veré si consigo en otra parte.) Le mandé dinero a Meli, para ella y para Canelita, y para que salgan a pasear con Clarice los sábados, como siempre, y para algunas ropitas para la reinita. Casandri, ¿cómo andás de ropa vos? ¿Cómo andan las ventas? ¿Te pintaron ya la casita? No puedo mandar más que ese poco dinero porque nada de trabajo aún, ni modo de tener visa de empleo acá si ya no viniste con eso.
Anoche (hoy es 19) llovió algo acá por suerte, ahora estamos maso en 35 grados, al menos se puede respirar (hay 40 grados, 98 grados Fahrenheit casi todos los días). El clima es terrible, las plantitas delicadas nacen, crecen de golpe y se mueren aunque las riegues.
Silvana aprobó todos los parciales y finales, incluso el de esa materia jodida, por suerte. Melina anda súper en la facu, supongo que sabrás y Canela anda súper en el cole, y se sacó notas realtas en el instituto de inglés. Eso está bien. Ayer me decía que ya entiende bien las canciones, eso es maravilloso, quiere decir que ya tiene oído, que es lo más embromado con los idiomas.
¿Claricita sigue bien en la escuela? ¿Qué aprende? ¿Ya escribe bastante en cursiva? ¿En historia ve historia argentina? ¿Y en ciencias naturales qué ve?
Casandra, hija, hace más de un mes que no me acostaba a la siesta, me dormí dos horas.
Extraño tomar café con vos, bah, vos mate y yo café, y fumar juntas. Es feo fumar sola… Ya vamos a fumar juntas cuando pueda ir, hijita
Clarice, mi reina, van unos chistes así te reís con mamá y con las amigas del cole:
Le dice el profesor a Juanito:
–A ver, Juanito, ¿qué te pasa si te corto una oreja?
Y le dice Juanito:
–Me quedo sordo.
–Y, ¿qué pasa si te corto la otra oreja?
–Me quedo ciego.
Y el profesor asustado le dice a Juanito:
–¿Por qué?
Y contesta Juanito:
–Porque se me caerían los lentes.
El profesor estaba en su clase de Química y pregunta:
–Si introduzco este reloj en esta sustancia, ¿creen ustedes que se disolvería?
Un alumno contestó:
–No.
–¡Muy bien! ¿Por qué?
–Porque si se disolviera, usted no lo metería.
En la sala de maternidad el jubiloso padre tomaba fotos de su bebé recién nacido. Le pregunta la enfermera:
–¿Su primer hijo, señor?
–No, ya tengo cinco, ¡Mi primera cámara!
–Mamá, mamá, ¡Me picó una víbora!
–¿Cobra?
–No, gratis.
–Mamá, mamita, ¡En la escuela dicen mis compañeros que soy un distraído de lo peor! ¿Verdad que no es cierto?
–Niño, tu vives enfrente, no aquí.
–Mamá, mamá ya no quiero una piscina.
–Callate y seguí escupiendo.
–Mamá, mamá ¿los chocolates caminan?
–No, ¿por qué?
–¡Ah!, entonces me comí una cucaracha.
–Mamá, mamá, hoy ahorré un peso, por que me vine corriendo detrás del colectivo.
–Te hubieras venido corriendo detrás de un taxi y ahorrabas 30.
Escríbanme, hijitas.
Clarice, nietita de mi alma, contame si te gustaron los chistes. Te mando algo sobre Napoleón, eso que vos me preguntaste la semana pasada, cuando te llamé por teléfono, y querías saber, me dijiste, qué relación tiene con Egipto, porque lo viste en esos dibujitos animados.
PD: Clarice, preciosa, en el cuento que te mandé la vez anterior, el de Elsita Bornemann, faltaba el principio, disculpáme, va acá (y creo que en una librería tienen ese librito, así es que el mes que viene te lo mando):
“Que un elefante ocupa mucho espacio lo sabemos todos. Pero que Víctor, un elefante de circo, se decidió una vez a pensar ‘en elefante’, esto es, a tener una idea tan enorme como su cuerpo… ah… eso algunos no lo saben, y por eso se los cuento.”
Casandra, escribime cuando puedas, las cartas tardan, pero llegan, quedate tranquila. Y no las mandes certificadas que cuestan un ovario, envío simple está bien.
Ah, una cosita, avisame cuando estés terminando de leer Ensayo sobre la ceguera, así te mando el otro. Me imaginé que los de Winterson mucho no te iban a gustar, pero yo me tragué ese libro que me sugeriste, así es que nobleza obliga, vos debías leer algo que yo te recomendara Además, me decís que no es que sea mala, sino que te resulta “demasiado filosófica”.
Me dijeron en la librería que traen El hombre duplicado en breve, así es que va de regalito el mes que viene.
Cuidense, mis reinas (no consigo ese librito que te comenté de Conrado Nalé Roxlo para Clarice, está agotado, y el disco de Nacha Guevara Para mis hijos, donde está el poema del que te hablé, ni modo de conseguirlo).
LAS AMO hasta el cielo.
Mami
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